TEORÍA DE
LA FUERZA
El
estudiante principiante podrá preguntar: ¿dónde se origina la fuerza que motiva
los resultados devastadores atribuidos al Taekwon-Do? Esta fuerza proviene de
la utilización de todo el potencial de una persona a través de la aplicación
matemática de la técnicas del Taekwon-Do. Una persona utiliza como promedio
sólo del 10 al 20 % de su potencial, sin tener en cuenta el tamaño, edad o
sexo, puede también poseer las mismas técnicas destructivas.
A pesar
de que el entrenamiento sin duda resultará en un magnífico nivel de aptitud
física, no concederá necesariamente un vigor extraordinario o una fuerza sobre
humana. Eso si, el entrenamiento del Taekwon-Do resultará en la obtención de un
alto nivel de fuerza de reacción, concentración, equilibrio, control de
respiración y rapidez; son estos los factores que proporcionan un alto grado de
fuerza física.
FUERZA DE
REACCIÓN
Según la
Ley de Newton, a cada fuerza le corresponde otra de la misma intensidad. Cuando
un automóvil choca contra una pared con la fuerza de 2000 libras, la pared
devolverá un fuerza de 2000 libras; o forzando hacia abajo el extremo de un
"sube y baja" con una tonelada de peso, habrá otra fuerza que tira
hacia arriba con la misma intensidad; si el oponente se abalanza sobre usted a
alta velocidad, con el más ligero golpe a la cabeza de éste, la fuerza con la
cual usted golpee su cabeza, será aquella de la embestida violenta del oponente
más la de su propio golpe.
Las dos
fuerzas combinadas; la del oponente que es grande, y la suya que es pequeña,
son impresionantes; en esto entonces, consiste la fuerza de reacción del
oponente. Otra fuerza de reacción es la suya propia. Un golpe con el puño
derecho aumenta de intensidad retirando hacia atrás el puño izquierdo hasta la cadera.
CONTROL DE
LA RESPIRACIÓN
La
respiración controlada no sólo afecta el vigor, sino que también puede
condicionar el cuerpo para recibir un golpe y además aumentar la fuerza de un
golpe dirigido contra un oponente. Mediante la práctica puede prevenirse la
pérdida del conocimiento y disminuir el dolor, conteniendo la respiración al
exhalar en el momento crítico de recibir un golpe en un punto de presión del
cuerpo. Una rápida exhalación del aliento en el momento del impacto y
conteniéndolo durante la ejecución de un movimiento, puede ayudar a la
concentración de la fuerza y promover rapidez; la inhalación lenta ayuda
a preparar el siguiente movimiento. Debe recordarse una importante regla: Nunca
debe inhalarse al dirigir un golpe contra un oponente. Esto no sólo
impedirá el movimiento, sino que también resultará una pérdida de fuerza.
Los
estudiantes deben practicar también el disfrazar la respiración para disimular
cualquier indicio visible de fatiga. Un luchador experimentado seguramente se
apresurará a atacar cuando se de cuenta de que su oponente está en el punto de
agotamiento.
EQUILIBRIO
El
equilibrio es de suma importancia en cualquier tipo de atletismo; en el
Taekwon-Do merece especial consideración. Manteniendo el cuerpo siempre en equilibrio,
esto es, bien balanceado, el golpe es más efectivo. A la inversa, es fácil caer
al no estar equilibrado. La postura deberá ser siempre firme pero flexible,
tanto para movimientos de ofensiva como de defensiva.
El
equilibrio se clasifica en dinámico y equilibrio estático. Estos están tan
estrechamente correlacionados que la fuerza máxima sólo puede ser producida
cuando la estabilidad estática es mantenida a través de la estabilidad
dinámica.
Para
mantener buen equilibrio, el centro de gravedad de la postura debe caer en
línea recta en medio de las piernas; cuando el peso del cuerpo se distribuye
igualmente sobre ambas piernas, o en el centro del pie cuando sea necesario
concentrar todo el peso del cuerpo en un pie. La flexibilidad y la elasticidad
de la rodilla son también importantes para mantener el equilibrio, tanto para
un rápido ataque como para una recuperación instantánea. Una recomendación
adicional: El talón del pie que queda atrás nunca debe dejar de apoyarse en el
sueldo al momento del impacto. Esto no es únicamente necesario para un buen
equilibrio, sino también para producir una fuerza máxima al momento del
impacto.